El Ministerio de Salud pidió limitar el movimiento de las personas sin vacuna.
abril 21, 2025
0
El 21 de abril, el Ministerio de Salud emitió una serie de resoluciones de emergencia con el objetivo de controlar y prevenir una explosión de contagios que amenaza
El 21 de abril, el Ministerio de Salud emitió una serie de resoluciones de emergencia con el objetivo de controlar y prevenir una explosión de contagios que amenaza con extenderse a lo largo y ancho del país. De acuerdo con el Ministro Guillermo Jaramillo, se instruyó a varias entidades a encargarse del seguimiento de las personas que aún no han recibido la vacuna.
La resolución establece una clasificación de los municipios según el riesgo que representan en relación con esta situación de emergencia. Las autoridades están encargadas de monitorear a las personas que entran y salen de estos municipios y a impedir que aquellos que no están vacunados puedan desplazarse a otras áreas, lo cual es crucial para el control de la situación.
Municipios sujetos a limitaciones de movilidad
La resolución 691 de 2025 designó áreas específicas del país como zonas de alto riesgo para la salud pública. En este contexto, se destacó la importancia de llevar a cabo una campaña de vacunación masiva, enfocándose en aquellas personas que aún no han recibido la vacuna. Por esta razón, se ha establecido la instalación de centros de vacunación en diferentes regiones del país.
Dentro de la clasificación del riesgo, se incluyen departamentos como la región de la isla, donde la exigencia de presentar una tarjeta de vacunación se convierte en una prioridad esencial para verificar que cada individuo cumpla con este requisito antes de ser autorizado a moverse libremente. La tarjeta de vacunación será la principal herramienta de verificación en este proceso.
Ministro de Salud, Guillermo Jaramillo. Foto:Nérstor Gómez. Tiempo
En una rueda de prensa del comando unificado establecido en Bogotá para atender esta emergencia, el Ministro Guillermo Jaramillo solicitó colaboración a las autoridades locales y a la facultad, enfatizando en el «control de movilidad» dentro de estas áreas críticas para evitar que la enfermedad se propague a otras zonas del país.
Vacunación contra la fiebre amarilla. Foto:Sergio Steel/Time
El Ministro también hizo hincapié en que «todas las personas que ingresen y salgan de estas zonas deben poder demostrar su estatus de vacunación». Para lograr esto, se coordinará una colaboración estrecha entre la policía, el ejército nacional, las autoridades locales y el Ministerio de Transporte para asegurarse de que los ciudadanos posean su tarjeta de vacunación.
Además, subrayó que el gobierno se encuentra trabajando en la elaboración de resoluciones que permitirán restringir la movilidad en estas áreas y que se está en contacto con las entidades pertinentes para asegurarse de que se cumpla con estas medidas, debido a la gravedad de la situación actual en ciertos municipios donde están ocurriendo explosiones de contagio significativas.
Limitar la fiebre amarilla Foto:Minsaled
Los municipios que han sido calificados como de alto riesgo se encuentran en los departamentos de Tolima (43), Valle del Cauca (1), Arauca (4), Casanare (22), Putumayo (13), Amazonas (11), Guainía (12), Vaupés (6), Vichada (4) y el Archipiélago de San Andrés (2).
Limitar la fiebre amarilla Foto:Minsaled
El Ministro también aseguró que se está considerando la situación de aquellos ciudadanos que afirman estar vacunados, pero no cuentan con la tarjeta de vacunación como comprobante. En respuesta a esta preocupación, se está elaborando una resolución que facilitará el proceso para la obtención de un duplicado de la tarjeta para quienes la hayan extraviado. Esto se implementará como parte de un esfuerzo más amplio para garantizar que todas las personas que están vacunadas puedan obtener un documento que lo respalde, ya que «aquellos que ya han sido vacunados no requieren recibir nuevamente la vacuna».
Por último, la resolución también estipula que aquellos que no posean el documento de vacunación deberán firmar una declaración jurada asumiendo la responsabilidad en caso de contraer cualquier contagio.
Este proceso es parte de un esfuerzo colectivo para proteger la salud pública y controlar la propagación de la fiebre amarilla en el país.