Dígale al abogado de la víctima
- mayo 2, 2025
- 0
José Erley Ramírez Garcés es el nombre de un hombre que se ha convertido en el centro de una angustiante controversia en Colombia, asociado a una serie de
José Erley Ramírez Garcés es el nombre de un hombre que se ha convertido en el centro de una angustiante controversia en Colombia, asociado a una serie de eventos lamentables vinculados a su comunidad en El pueblo de San Andrés de Chinchiná (Caldas). Este individuo está siendo acusado de abuso hacia su hijastra y de otros delitos de gran gravedad. Hasta la fecha, se ha emitido una orden para privarlo de libertad, y enfrenta cargos relacionados con tres delitos distintos.
El hombre, quien además era pastor de la Santa Rosa de Cabal (Risaralda), ha sido acusado de realizar conductas inapropiadas contra mujeres y niñas, incluyendo el acceso corporal ofensivo y el secuestro. No obstante, Ramírez Garcés no ha aceptado ninguna de las acusaciones formuladas en su contra.
Un importante desarrollo en esta historia fue dado a conocer cuando tuvo la oportunidad de hablar con Julián Martínez, quien es representante del abogado de un niño víctima de estos terribles hechos. Martínez revela que la víctima, un menor de 13 años, sigue hospitalizado. Este niño requiere atención médica y psicológica debido a los estragos que estos abusos han dejado en su vida; además, los momentos cruciales fueron capturados en las grabaciones de las cámaras de seguridad.
Otro aspecto inquietante es que se filtraron varias fotos de un agujero en el suelo y un gran acetábulo en la parte trasera de la granja de Ramírez, donde aparentemente él habría considerado enterrar al menor tras los intentos de acabar con su vida. Esta revelación ha elevado la preocupación en la comunidad.
Caneca y agujero, que según informes, fueron creados por el hombre en su granja para ocultar el cuerpo del niño. Foto:Archivo privado
Martínez explicó además que Ramírez Garcés al parecer había dicho: «Bueno, es posible que me gustaría hacerlo, no solo contra una niña, sino también contra mi madre.» Sin embargo, debido a los complejos aspectos legales en Colombia, no fue procesado por el intento de asesinato, ya que la legislación penal se basa en las acciones cometidas y no en las intenciones.
La defensa de Ramírez Garcés sostiene la esperanza de que su cliente reciba una condena ejemplar debido a la gravedad de los delitos imputados, los cuales conllevan múltiples cargos. «En este momento, se pregunta si puede durar unos 40 años de prisión», agregó Martínez.
«Este es el enfoque que vamos a trabajar junto con la fiscalía. Afortunadamente, el fiscal que está a cargo de la niña ha realizado un trabajo impecable, y el abogado defensor de Ramírez ni siquiera ha intentado atacar las evidencias.» Según el abogado de la víctima, «la recopilación de pruebas es bastante amplia, por lo que esperamos resultados positivos que beneficiarán a la justicia en este caso y a la víctima.»
Captura de un video que muestra la persecución de un menor. Foto:Archivo privado
Actualmente, Ramírez Garcés está esperando que INPEC determine en cuál establecimiento penitenciario será recluido mientras se desarrolla el juicio legal. Su defensa ha solicitado que se mantenga en un penal alejado del café, temiendo que pueda sufrir represalias mayores. La entidad mencionada debe revisar la disponibilidad y viabilidad de esta solicitud.
Teléfono de Mable a comunidad
El contexto de este caso ha generado un gran revuelo en la comunidad. Tras los horripilantes relatos de violencia, donde se asumió que el niño había escapado descalzo con una cuerda alrededor del cuello y cinta en el rostro después de los abusos de su padrastro, la comunidad se sintió profundamente indignada y ha comenzado a hacer eco de acciones violentas.
Una de estas acciones fue un ataque a la sede del Ministerio Protestante del Reino, que se halla en la Comuné de Santa Rosa. Este lugar es significativo, ya que allí José Erley Ramírez Garcés llevaba a cabo su labor eclesiástica, incluyendo cantos y bautizos en los ríos de la zona.
José Erley Ramírez en una de las actividades de la Iglesia Protestante donde era pastor. Foto:Archivo privado
Lamentablemente, este lugar también funcionaba como residencia del agresor y de la familia que allí vivía, incluida la víctima. «La comunidad está bastante molesta, y la situación no ha sido bien recibida por nadie en el área. Ha habido daños en el lugar, lo cual afectó también a la familia, dado que al regresar encontraron el lugar hecho un caos», añadió Martínez.
Se reitera que el abogado ha hecho un llamado a la comunidad para que mantengan la confianza en el sistema judicial y en las instituciones, evitando tomar acciones que pudieran comprometer la investigación o desestabilizar la paz de la víctima y su familia.
La policía de Caldas capturó al pastor cuando salía del centro médico. Foto:Police Caldas
El futuro de Ramírez Garcés es incierto, pero se prevé que en los próximos 90 días se realicen nuevos interrogatorios para continuar con el proceso legal, lo que podría evitar la posibilidad de que este hombre sea liberado antes de tiempo.
También puede estar interesado:
El fiscal solicitará exclusión a favor de Álvaro Uribe. Foto:
