Diminuto ha hecho de nuevo algo asombroso: reunió una impresionante alineación de cantantes destacados de diferentes géneros en un espectáculo que tuvo lugar en un escenario diseñado con un espectacular formato de 360 grados. Este evento no solo foi un concierto, sino una celebración de la música y la cultura.
El emocionante día para los fanáticos de Juan Luis Londoño comenzó temprano, a las 11 de la mañana, cuando el festival organizado por Paisa dio inicio de forma gratuita el Viernes 25 de abril. La anticipación se palpaba en el aire, y muchos estaban listos para disfrutar de un día lleno de emociones y buena música.
A las 7 AM comenzó la apertura, con una alineación de artistas destacados que incluían a Maisak, Paulina, Tuto y abril, quienes dieron inicio a una fiesta musical que encendió la energía de los asistentes en el vibrante Atanasus Girardot. Fue el calentamiento ideal para lo que vendría más tarde, preparando a todos para una experiencia inolvidable.
Después de meses de espera, alrededor de las 9 a.m., la taquilla de Medallo finalmente abrió, dando paso a la llegada de los fanáticos ansiosos. Maluma prometió a su audiencia una noche épica en su ciudad natal, y sin duda cumplió sus promesas.
Con un repertorio que incluyó sus éxitos más sonados como El cassette, perdedor, carnaval, corazón, feliz 16.11 y su renombrado himno global «hawaii», Maluma mantuvo a la multitud cautivada durante tres horas ininterrumpidas de música. La atmósfera en el lugar fue inigualable, con un nivel de euforia que alcanzó nuevas alturas cuando se presentaron otros artistas internacionales.
El talentoso mexicano Carín León subió al escenario, interpretando su colaboración con Maluma y brindando a Medellín un estreno emocional con el tema «si me vieras». Después, la aparición de otro paisa, Feid, elevó aún más el tono del evento al unirse a DFZM para interpretar «Wouting Sillers».
El Grupo fronterizo llevó a los espectadores en un viaje musical hacia el norte, mientras que otro querido paisa, Juanes, tuvo uno de los momentos más emotivos de la noche, al cantar con Maluma «La camisa negra», un homenaje conmovedor a sus raíces paisas.
Las sorpresas no se limitaron a esos artistas, pues 21 ° piso, Peláez, buena tubería, y bendito también vibraron con el ritmo de +57, junto a Lenny Tavárez y Justin Quiles. La diversidad de estilos presentados en el escenario reflejó el talento musical de la región.
Tiny y 21 apartamentos en el escenario
Peláez pequeño y tubular
El reggaetón «Old School» también tuvo su merecido momento, impulsado por artistas como Blow, Fain, Chako, Tres Pesos y Lobo, reafirmando a Medellín como un verdadero epicentro global del reggaetón.
Uno de los momentos más significativos ocurrió cuando Maluma dejó momentáneamente el escenario mientras interpretaba «ADMV». Se acercó a la zona donde se encontraba su novia, Susana Gómez, y transformó un instante romántico en un bello recuerdo, interrumpiendo la canción llenándola de besos y gestos afectuosos.
«Mostrar» en un nivel diferente
El espectáculo incluyó más de 2.700 dispositivos pirotécnicos que iluminaron el cielo en 38 puntos estratégicos, creando una vista deslumbrante. Las pantallas gigantes, junto con la coreografía espectacular y los disfraces de diseño exclusivo, complementaron un sistema musical que había sido perfeccionado durante cinco días de intenso trabajo, con jornadas de más de 16 horas utilizando estructuras importadas de Bélgica y la tecnología más avanzada para asegurar un espectáculo memorable.
Maluma vendrá a Bogotá el 3 de mayo con este mismo programa espectacular, prometiendo repetir la mágica experiencia para más seguidores. Sin duda, el evento dejó a todos con ganas de más y mostró una vez más el increíble potencial del talento colombiano.
María Alejandra Rodríguez Castellanos
Subeditor Medellín