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En Cali es muy raro que los ciclistas utilicen las ciclovías exclusivas, debido a la gran cantidad de motociclistas que se han apoderado de estos carriles a puro
En Cali es muy raro que los ciclistas utilicen las ciclovías exclusivas, debido a la gran cantidad de motociclistas que se han apoderado de estos carriles a puro «valentía» y al rugir de sus motores. Tanto es así que muchos las consideran “motocicletas” más que bicicletas.
Incluso las mega brigadas establecidas por la Secretaría de Movilidad, que bajo el lema del alcalde: «Recuperemos Cali», no fueron suficientes para controlar el flujo de motociclistas que transitan por estas ciclovías, que En algunos casos, han generado disputas con agentes de Movilidad de Cali y los propios ciclistas, quienes queriendo contribuir a mejorar la cultura vial terminan cara a cara con motociclistas que deciden invadir su territorio.
Los motociclistas invaden las ciclovías a todas horas del día. Foto:Secretario de Movilidad de California
En las últimas semanas han regresado las inspecciones a estas zonas, lo que sorprendió a muchos motociclistas, algunos incluso pensaron que era una zona destinada sólo a motociclistas, y otros, con el pecado sobre sus hombros, intentaron escapar del control de las autoridades.
Una situación similar ocurre en el caso de las incursiones en carriles bus del sistema MIO, donde ya se han producido accidentes. Esta partida comprende también los automóviles de todo tipo.
Tener el control de los carriles destinados exclusivamente a bicicletas y MIO es parte del objetivo de las autoridades de tránsito de la ciudad, implementando su misión de restablecer el orden en las vías ante un paisaje complejo.
Según datos de la Secretaría de Movilidad de Cali, las motocicletas representan el 74 por ciento de las infracciones, o 7 de cada 10, por lo que se cree que deben seguir estando sujetas a controles y medidas para proteger vidas y estándares.
La ciudad está intentando aumentar el número de dispositivos de control de la movilidad. Foto:policía de california
La misma unidad distrital sitúa la intrusión de motociclistas en el carril MIO entre las cuatro principales convocatorias del C14 (34.514 motos, 9%), en el periodo comprendido entre el 1 de enero y el 31 de octubre. Por ello, vuelve a subrayar el objetivo principal de la acción: «Cuidar el carril MIO, especialmente las motocicletas».
Para el Ministerio de Movilidad, además de mantener el orden, también se trata de salvar vidas, dado que los motociclistas son los más vulnerables ante accidentes viales, especialmente si ingresan a los carriles del MIO, donde están expuestos a mayor riesgo.
Y a pesar de la intensificación de las acciones y controles, este año (del 1 de enero al 31 de octubre de 2025) murieron 125 motociclistas, menos que en 2024, cuando fueron 132. Y entre el total de víctimas mortales, incluidos todos los usuarios de la vía, los motociclistas constituyen el 58,8%.
Según el Observatorio de Movilidad de Cali, este año (enero – octubre) se han registrado 67 ataques, mientras que en el mismo periodo del año pasado fueron 42, un aumento del 60%, considerando que algunos casos de ataques aún continúan.
Mariscal informó que continuarán inspecciones con el fin de restablecer la cultura vial Foto:Secretario de Movilidad de California
«Además, durante estos diez meses de 2025 ya se ha superado el número de ataques para todo el año 2024 (67 hasta ahora en 2025 frente a 45 en todo el año 2024)», señaló la unidad distrital.
Por parte de esta agencia condal, uno de los factores que cambió el rumbo del respeto a la autoridad de tránsito fue el estallido social “donde tanto ha cambiado la cultura de la ciudadanía y el respeto a la autoridad”.
“Algunas de las acciones requeridas son denuncias en los medios y prevención por parte de los propios agentes”, agregó Movilidad Cali.
Ante un creciente clima de agresividad hacia los agentes de tránsito, en el que videos virales muestran insultos, amenazas y hasta agresiones físicas, la reconocida psicóloga Gloria Hurtado ofrece una lectura profunda y desafiante: los agentes no son el problema, sino el espejo de un sistema que ha fracasado.
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“Se está cuestionando a la autoridad porque ha fallado”, dijo Hurtado.
«Hoy, en muchos casos, el poder se ha vuelto autoritario: ‘hago lo que quiero porque tengo poder’, como si estuviera por encima de la ley. Y esto no es sólo de Cali o Colombia: es un fenómeno global», agregó.
El experto señaló que el enfado se acumula entre los agentes de tránsito y la sociedad no sabe cómo liberarlo.
«Un agente de tránsito es una autoridad, pero no es, por decirlo entre comillas, una autoridad peligrosa. No tiene pistola ni revólver, no puede encarcelarte, no te quita el permiso de conducir de por vida… ¿Qué puede hacer? Presentar una denuncia, una multa. Y ya está», señaló.
Según Hurtado, esta limitación lo convierte en el perfecto chivo expiatorio: «Es una autoridad fácilmente cuestionable. Es accesible y visible. Y cuando te han tratado mal el sistema, la burocracia, la corrupción, la desigualdad, no puedes pegarle al ministro ni al alcalde… pero sí puedes gritarle al agente que te paró por ir en sentido contrario, por no llevar casco o por entrar en la ciclovía.«.
«Es una liberación de la ira reprimida, una ira que surge de sentirse aplastado, ignorado, invisibilizado. Y como el agente no puede responder con violencia, no puede vengarse… entonces tú mismo lo asumes. Ella lo insulta, lo amenaza, lo graba y lo humilla. Y esto, en lugar de curarla, profundiza la fractura social».
JOSÉ ANTONIO MINOTA HURTADO
EDITORIAL EL TIEMPO CASA
COLOMBIA
Continuación de la acusación contra Nicolás Petro. Foto:
